El Amor ha agitado mis entrañas como el huracán
que sacude el monte bajo las encinas.
Se han puesto ya la Luna y las Pléyades.
Es media noche.
Pasa el tiempo.
Y sigo durmiendo sola.
Viniste.
Hiciste bien.
Yo te estaba aguardando.
Has prendido fuego a mi corazón,
que se abrasa de deseo.
Safo de Lesbos