lunes, marzo 02, 2009



Las lágrimas son la sangre del alma.

San Agustín


“Yo soy feliz”, dijo. Naturalmente se trataba de un necio.

Proverbio persa


Mira a las estrellas, pero no te olvides de encender la lumbre en tu hogar.

Proverbio alemán


Los jóvenes van por grupos, los adultos por parejas y los viejos van solos.

Proverbio sueco


Oh, qué amargo es contemplar la felicidad a través de los ojos ajenos.

Shakespeare


En la prosperidad los hombres piden muy poco a Dios. En la adversidad, le piden demasiado.


No te esfuerces tanto, no va a valer de nada.

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