No finjas más, no ocultes la excesiva
hambre de mí que te arde en la mirada.
A. Gala
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
En este pequeño rincón pretendo crear un punto de encuentro entre un grupo de amigos que llevamos años relacionándonos en la red. Un hogar humilde, sin pretensiones, pero agradable y acogedor... para ellos y para quien quiera unirse a nosotros.
2 comentarios:
La muchacha dorada
se bañaba en el agua
y el agua se doraba.
Las algas y las ramas
en sombra la asombraban
y el ruiseñor cantaba
por la muchacha blanca.
Vino la noche clara,
turbia de plata mata,
con peladas montañas
bajo la brisa parda.
La muchacha mojada
era blanca en el agua,
y el agua, llamarada.
Vino el alba sin mancha,
con mil caras de vaca,
yerta y amortajada
con heladas guirnaldas.
La muchacha de lágrimas
se bañaba entre llamas,
y el ruiseñor lloraba
con las alas quemadas.
La muchacha dorada
era una blanca garza
y el agua la doraba
Federico García Lorca
Muy bonito
:)
Publicar un comentario