MAITINES – A. Gala
Callad, amantes, y ocupad el labio
con el beso. No pronunciéis palabras vanas
mientras se busca vuestro corazón
en otro pecho, jadeante y pobre
como el vuestro,
ya al filo de la aurora.
Cuando te poseí por vez primera
tocaban a maitines
en el Convento de las Mercedarias.
La tiniebla del aire estremecieron
repentinos palomos alterados.
Titubeante el alma sonreía,
sin comprender por qué, en torno a tu cintura.
Y luego, hasta la alcoba recién inaugurada,
fueron entrando laúdes y alabanzas
que mi alma repetía con orgullo
suavemente en tu oído.
Callad amantes y ocupad
el labio con el beso....
3 comentarios:
Uff, qué calores :P Vuelves a las andadas.
Tienes un premio en mi blog. Felicidades.
¡¡¡ Me encanta !!! Es una poesía de amor realmente impresionante. Es preciosa. Me gusta leerla de vez en cuando. Para mí es muy especial, muy significativa. Nunca me canso de leerla. Qué bonita foto. Le va muy bien.
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